29 junio 2006

Tipo Shane

Desde que el mundo es mundo y sobretodo, desde que Romy y yo sabemos que somos del gremio nos hemos fijado que también nosotras seguimos una serie de modas. Todas recordareis hace unos 10 añitos, con el boom de las Spice Girls que cada una tenía una spice favorita. Esta spice solía ser Mel B. o Mel C. (que era la que más porte tenía de todas) y eran nuestras favoritas no porque quisiéramos ser de mayor como ellas (quién en su sano juicio querría ser como Victoria Adams-Beckam de los Dolores? Y no vale decir Anita Obregón). No, todas teníamos nuestra spice favorita que era la que nos queríamos tirar.

Unos años más tarde aparecieron las t.A.T.u y su “Ol de cins si sed”. Ese video mítico de las dos chiquillas dándose el palo bajo la lluvia, vestidas de uniforme, sacadito de una peli guarrilla. Además de escandalizar a todo bicho viviente revolucionó a las lesbianas de medio mundo. Entonces surgió la moda t.A.T.u : asín como de colegiala jachonda (mis pantorrillas no me permiten ponerme una falda medianamente corta sin el riesgo de que alguien me pegue en la cacha una etiqueta de Revilla). Luego se descubrió que era un tongazo (claro, y las spice no xD) , aún así, si metes una canción de ellas en el Truco o en el Medea nos ponemos todas a berrear como corderas.

Ha habido más personajes que han creado moda y escuela aparte de las mencionadas, pero solo una ha llegado a un nivel superior…y esa es Shane Machutón.

Shane Manchatan es uno de los personajes más importantes de la serie “The L Word” (L en Jespaña), la Serie de Bolleras en mayúsculas (porque ha sido la primera básicamente). Shane Mechuton es una peluquera de veintitantos, que ha tenido un pasado muy duro, que no es que esté muy buena (no tiene chicha) pero tiene mucho morbo. Su forma de vestir andrógina y su carácter enigmático hace que todas las hembras del mundo mundial la deseen (heteros incluido por supuesto). Ella, muy amiga de sus amigas (pero de las de verdad) es un espíritu libre, incapaz de tener ningún compromiso con nadie, solo ligues esporádicos a los que después romperá el corazón…lo que en mi barrio se la suele denominar “la muy zorra”. Vamos, es el tipo que todos queremos ser (que moja mucho y tal) pero con la que no tendríamos nada serio (amos, digo yo).

El caso, Shane Muchatun es la creadora del “tipo Shane”. Si tu ves a una chica con una corbata, con una camisa coja, o con una camiseta ajustada y encima una chaqueta, unos vaqueros raídos, va vestida “tipo shane” (sí, Jesús Vázquez va vestido tipo Shane, pero no creo que lo sepa). Si llevas un móvil de esto turbofashions que tiene tapita y tal es un móvil “tipo Shane”. Si tienes cara de no haber dormido en tres días y llevas el pelo revuelto medio engominado (con una textura sospechosa) llevarás un look “tipo Shane” (ver temporada 2 de The L Word, en especial los primeros capítulos).

Shane ha marcado un antes y un después en el look bolleril, ha creado escuela, ha movido más. Te queremos Shane Machiten.

Nota 1: Romy, entre que está sin conexión o está perdida por Inglaterra, no ha podido hacer acto de presencia por aquí.

Nota 2: Obviamente, Romy y yo seremos los siguientes ídolos de las nuevas generaciones de bollines.

Nota 3: ¿Cómo coño se apellida la tía esa?

23 junio 2006

Juguetes para compartir

Aprovechando que en el capítulo anterior hablábamos de nuestra Marica Mala me siento en la obligación de contar cierta costumbre que tuvimos las tres (ya que Romy se hace la estrecha y dice que le da corte ¬¬).

Cuando se acercaba el cumpleaños de MM (sí, ese que se nos ha olvidado y por el que pedimos perdon yendo a misa todos los domingos) decidimos pillarle algún detallín. La ropa quedaba descartada ya que la franela no es el tejido que más le gusta a este hombre y nosotras de lentejuelas sabemos más bien poco. Música o una peli tampoco nos llamaba (se la va a bajar de la mula, así que xD). Así que, pensamos -no mucho- en lo que más le gustaba a nuestra MM y exactamente es eso que estais pensando una P**** como una OLLA (me niego a escribir cualquier otro sinónimo que sea distinto a pilila o colita >_<).
La cosa era comprar una bicha de esas (pero en versión plastico claro). Así que Romy y yo nos fuimos al uno de los múltiples sex shops que hay por madrid: el que esta en Callao. Yo, como buena mujer de mundo, ya había entrado varias veces (de hecho, en esa semana tuve que ir a por otro regalo xD) pero para Romy, como Paco Martinez Soria en "La Ciudad no es para mí", era su primera vez, cambiando la idea de ciudad por la de sex shop. Pensaba que iba a estar cortada, que en el fondo es una mujer tímida e inocente , pero no...allí estuvimos las dos cotilleando todo lo cotilleable y comparando precios y tamaños. Como el regalo iba a ser para MM tendríamos que buscar una cosa de esas que fuera diametralmente opuesta a nuestros gustos...y la encontramos. Era una cosa rosa cantoso, con sus venitas, con un tacto desagradable...vamos una pilila. Cuando decidimos que queríamos ESA Romy, con toda la decisión (y las pelas) se fue a pagar a la caja como si hubiera comprado ya cienes y cienes de cosas de esas xDDDD.
Cuando llegó el cumpleaños de MM no nos lo pensamos dos veces y le dimos su regalo...en medio de la puerta de la facultad. Ella, que es muy discreta, saco la cosa esa rosa de su envoltorio y mientras gritaba "ME ENCANTAAAA" daba pollazos a todos los pobres frikis de alrededor (parecía una hada madrina con su varita xD). Un par de meses después llegaba mi cumpleaños y para seguir la tradición me regalaron un objeto similar al de MM pero con las siguientes diferencias:
1.- Un hermoso estampado de cebra
2.- Liso, sin venitas ni capullos ni cosas que me dan mucha grima
3.- Regulador de velocidades (muy importante!!)
El como lo compraron no tengo ni zorra (ahí le toca dar los detalles guarros a Romy), pero el como me lo dieron no se me va a olvidar en la vida. Romy no pudo quedar, así que salimos solo MM y yo una tarde para dar una vuelta. Cuando íbamos por la calle Gran Vía me da la bolsa que llevaba y me dice "Felicidades Bollera, lo siento pero no lo hemos podido envolver". Así que al abrir la bolsa veo un paquetín en el que sale una señora vestida con unas mallas de bonito estampado de cebra (a juego con el vibrador), un peinado muy años 80 y una cara de "te voy a comer eso que tienes entre pata y pata" en el que se puede leer:
Take a Walk on the Wild side

Ni que decir tiene que MM me obligo a abrirlo y sacarlo en medio de la Gran Vía, justo delante de un guadria civil.


Unos meses después tocaba el cumpleaños de Romy, sabiendo que es lo que le iba a tocar nos pidio que por favor no le regalaramos nada de ese tipo (estrecha ¬¬), así que le pillamos un libro con fotitos de Star Guas que aunque no es guarro es mazo friki ^^

16 junio 2006

La Marica Mala

Hubo un tiempo (bueno, no hace mucho, que una no se dio cuenta de que estaba dentro de un armario hasta hace un par de añitos, cosas de ser muy parda e inocentona) en el que Romy y Michele, como Martes y Trece en su día, éramos tres: el trío lalala compuesto por Romy, Michele y la Marica Mala.

Nuestros rasgos comunes eran varios: ser un poquito bolleras (en el caso de la MM un poquito-bastante gay), frikis, ser unos juergas asquerosos (sólo que además él baila kitikagas de bien) y además físicos en proceso (aunque eso sí, cada uno de su padre y de su madre, quicir de una especialidad).

Fue precisamente la MM quien me puso el cariñoso mote de labolleraquenosabequeesbollera. De esto no me enteré hasta un día que salimos los tres por Chueca (vale, lo mío ya era evidente) en el que, guiadas por la MM, de pronto Michele me arreó un codazo en las costillas para decirme que se lo dijera de una vez a la MM (yo no se lo había dicho porque daba por hecho que lo sabía). La cosa fue:

Romy: "Eeerr... oye una cosita..."

Marica Mala: "¿Sí?"

Romy: "Emmm... tú ya sabes que soy lesbiana, ¿no?"

Marica Mala: "Ah, sí, claro."

Romy: "Ah, vale"

Aquí fue cuando yo me giré a Michele con cara de marisabidilla diciéndole "¿Ves? Ya lo sabía". Y seguimos una noche chuequil más.

Curiosamente ahora que me acuerdo, la Marica Mala, y no Michele, fue la primera persona con la que fui a un garito en Chueca. Fue durante un botellón que hicimos en la facultad para celebrar que una tía de nuestra quinta se había licenciado (ninguna la tragábamos, pero el alcohol gratis es lo que tiene). Esa noche después de hacer pipí en los muros de la facultad, acabamos en Chueca, donde estaban en pleno auge las fiestas del Orgullo, y yo no hacía más que pensar "huy huy huy cómo me gusta esto..." (esto era cuando la única que lo sabía aún era yo... o al menos eso creía).

Unos días más tarde, en la mani del Orgullo, volví a ver a la MM (Michele apareció y desapareció en busca de su ahora ex) y estuve con él un ratito (hasta que a mí me entraron los siete males y me fui corriendo a casa - previo paso por los baños de Atocha y no precisamente para lo que Michele los utiliza últimamente *ejem* - a decirle a mi mama "maaama qué malastoi"). Pero eso es harina de otro costal y prefiero no recordarlo >_< Naturalmente, el amigo se despiporraba de la risa con mis frustrados intentos por parecer hetero...

Supongo que la mejor definición para la Marica Mala sería decir que es divina (sus boas, la rosa y la azul con hilitos plateados dan fe de ello). Pero la MM, aparte de ser divina y, bajo mi punto de vista totalmente inválido para estas cosas, estar bastante bueno (voy a lavarme la lengua con jabón después de decir eso), es muuuuy discreto. Cosas como gritar por los pasillos de la facultad "Bollera de los cojones!" a Michele cuando la llevaba llamando un rato por su nombre sin que ella se diera la vuelta (está claro que entonces sí que se volvió), o gritarme a mí en mitad del metro de la línea 6 en hora punta "Cómo se nota que eres bollera -una de sus frases favoritas, por cierto xD-, se chupa pero no se muerde" (nota para candidatas potenciales: no muerdo, sólo si me lo pedís con cariño ^^) son esas cositas que hacen que cuando le ves, el gaydar te explote en la cara. O como aquella vez que Michele y yo le compramos un vibrador (esto os lo contaremos algún día, bueno os lo contará Michele que tiene menos vergüenza xDDD) asquerosamente realista por su cumpleaños, y cuando se lo dimos, en la puerta de físicas, empezó a darle con él en la cabeza a todo bicho viviente que saliera de la facultad - suerte que en ese momento no salió... qué voy a decir yo... Rañada por ejemplo xDDDD

Así que bueno, podría contar muchas anésdotas más, pero lo voy a dejar aquí. Nuestro pequeño homenaje a nuestro nene, que le queremos un montón y desde que se nos fue a Asturies nos ha dejado el taburete cojo *ains* - y a ver si así no se nota que nos hemos olvidado de su cumpleaños v_vU

10 junio 2006

Las Chicas de Oro

Somos unas juergas y nos gusta más una fiesta que a una bollera una teta, pero también hacemos cosas más tranquilas y relajadas que el salir de fiesta y ponernos de alcojol hasta el culo (bueno romy, que yo me he emborrachado oliendo colonia xD). Tenemos otra cara, quizás más oculta, que a muchas de nuestras fans (tenía que ponerlo xD) le sorprenda y es que a veces somos un par de yayas de cuidado.

Hace unos meses, cuando yo tenía vida por la tarde, es decir, no curraba, solíamos quedar Romy yo para tomar algo. Ese “tomar algo” era quedar en gran vía (aún no había nacido cucarachita) y dar una vuelta por el centro...es decir, chueca. Sieeeeempre terminábamos allí, semos así de originales e imprevisibles. En invierno teníamos un pase, porque nos íbamos al starbcuks a por un cafetito caliente y tal (él tal son los madalenoncios tochos que tienen) pero en verano era más complicado. Con el calor lo único que apetece caliente es un polvo, y de eso entre las dos chungos (ya sabéis, una es tradicional y hasta que no nos casemos no copularemos). Una persona normal iría a una terracita pero visto que te soplan en exceso por una cocacolas y yo soy de la cofradía del puñocerrao (casi tanto como paca xD) solemos hacer algo más económico: un botellón. Nos vamos a Vázquez de Mella y allí nos montamos nuestro “botellóndelamuerte” el cual se caracteriza en :
1.- Sustituir el calimocho por una botella de nestea para Romy y alguna guarrería líquida para mí (sin alcojol).

2- Pillar algo de papeo sustancioso como una bolsa de doritos o mejor, de pipas.

Así que la imagen que tendréis en vuestras perversas cabecitas es de dos chicas sentadas en un banco comiendo pipas, y viendo a la gente que pasa...es decir un par de yayas.

Nota: Romy es una hembra hecha y derecha pero una es una pobre jovenzuela que esta estudiando aún (sí, aún ¬¬) y que esta ocupadísisisima haciendo que estudia para los exámenes de junio, de ahí la brevedad y la tardanza del post (y la pereza, para que engañarnos xD)

02 junio 2006

Maripili

Como ya la hemos mencionado alguna vez, creo que ha llegado el momento de hablar de uno de los personajes del ambiente (chuequil, para más señas) con el que nos hemos tropezado de vez en cuando, muy a nuestro pesar. Se trata de... Maripili.

Era una fría noche de invierno... (en realidad no me acuerdo de si era invierno o verano, probablemente fuera una cálida noche primaveral pero es lo que tiene la memoria de pez)... una noche, eso seguro, en la que decidimos ir por primera vez al Medea, "ese antro de perversión". Conste que lo de antro de perversión no es nuestro, porque no lo conocíamos de nada, pero la ex de Michele nos lo había pintado como Sodoma y Gomorra pero a lo bestia y con trailers en la puerta. Pelín bastante sagerá la mujer, pero bueno.

Esa noche quedamos Michele y yo en Cibeles, donde nos recogieron la yaya e idie_1980 que venían en el yayamóvil. Nos metemos en el coche y nos vamos rumbo a lavapiés entre música de regaetton, que por entonces estaba dando sus primeros gateos (lástima no haberlo cortado a tiempo). Conseguimos aparcar (bueno, la yaya que para estas cosas es muy apañá) y nos ponemos a buscar la calle Cabeza, que resulta ser una calle estrechita de éstas típicas de Lavapiés, y más larga que un día sin pan. Para darle más emoción al asunto, no había ni un alma por la calle (serían las doce o así, era bastante pronto) y no se veía ningún cartel de "Bollos here!" por ninguna parte.

Una, que había mirado la dirección en intenné, estaba segura de que el sitio era el correcto, y que como mucho lo podían haber chapao (pero confiaba en que no hubiera sufrido el mismo destino que Discotheque, un bar bollo cerca de Chueca del que oí hablar mil veces pero que creo que es una leyenda urbana, aunque Michele dice que ella ha estado). Después de unos diez minutos recorriendo la calle, vemos una débil lucecilla al fondo. Nos acercamos y bingo, un cartel pequeñito y discreto indica "Medea" en letras blancas sobre fondo negro. Lo mejor es la puerta, toda de chapa, con un ventanuco a la altura de los ojos (de los ojos de alguien con estatura decente, a mí me queda alto) y empezamos a desvariar...

Romy: "Joer, ¿nos van a pedir la contraseña para entrar?"

Michele: "Sí, - aquí dijo alguna contraseña de coña tipo 'Oldecinsised', 'MegustaMelisaEtheridge' o similares - Y si no te la sabes llaman a Maripili, que es la segurata... ¡Moropolo!!" (léase como Maripili pero con voz de pájaro de 1500 kilos subido a una rama)

Como nos daba cosita llamar a la puerta a golpes (aunque en mi pueblo se hace así) llamamos a un timbre que no suena o_O y nos abren (sin contraseña ni nada). Pagamos ateamente la entrada (religiosamente no, gracias) y pasamos la segunda puerta con un poquito de miedín por lo que nos podíamos encontrar. Y lo que nos encontramos fue... con el garito vacío (que suele ser una constante en nuestras salidas), una pista de baile más o menos grandecilla, una barra con tres camareras (menos mal, porque casi nos ganan por número), y unos sofas sobre los que nos abalanzamos como perras en celo. Nos pedimos la copa y/o refrescos (Michele y yo copa, ofcors) y nos sentamos a disfrutar del recital non-stop de Malú (en serio, a mí Malú me gusta, pero nos pusieron un disco detrás de otro y cuando parecía que iba a cambiar te ponían a Alejandro Sanz... haciendo un dúo con Malú u____u). Ya después de un rato, cuando el alcohol empezó a hacer efecto y por fin cambió la música, Michele y yo nos pusimos a bailar, teniendo una de nuestras discusiones absurdas de por qué no ligo y tal (suelen consistir en "no ligas porque no quieres porque bailando así..." y yo me hago la inocente y me arrimo más ^^).

El garito empezó a llenarse, pero sin agobios, y después de un par de horas, cuando estaba en su mayor punto de ebullición, Michele señala a la puerta deshuevándose y dice: "Mira, Maripili!!!".

Imaginaos... a una tía de unos dos metros de diámetro, con el pelo moreno alborotado por describirlo de alguna manera, con mallas negras de la época de Eva Nasarre, una camiseta azul de abanderado, una riñonera negra y gafas de sol de la niña de la Puebla (puestas, por supuesto), cubata en mano y orbitando por toda la pista de baile al ritmo de su música interior... >_<

A partir de entonces la noche fue mucho más divertida, porque cada vez que sentíamos su atracción gravitacional, huíamos y gimoteábamos como cachorritas (como perras, vaya), hasta que llegó la hora en la que dijimos ámosnos, con el firme propósito de no volverla a ver (a Maripili, el Medea se ha convertido en uno de nuestros habituales, porque de antro de perversión tiene bastante poco).

Ni que decir tiene que desde entonces noche que salimos, noche que nos la encontramos (a ella o a frikis similares). Para imágenes impactantes (porque sí, existen documentos gráficos), pedirle la foto a Michele que en un alarde de huevos le echó una al movil (pero desde lejos por si acaso). Pero cuidado, puede herir vuestra sensibilidad (si es que tal cosa existe).